Gimnasios de pesadilla

Curioso articulo publicado recientemente sobre sucesos “repugnantes” que te puedes encontrar en un gimnasio. No tiene desperdicio...

¿Eres de los que piensa que lo más duro del gimnasio es sobrevivir a una machacante sesión de Spinning? ¿O a una machacona clase de aerobic? ¿O no venirte abajo ante la inevitable comparación de tu blandito cuerpo acosado por las agujetas con esos adonis de músculos duros como piedras que te miran por encima del hombro? Pues no, por muy duras que esas situaciones puedan parecer, en el gimnasio hay que hacer frente a cosas muchísimo peores.

Eso es, al menos, lo que se deduce de una encuesta realizadaen EE.UU. a miles de usuarios habituales de gimnasios de todo el país. Concretamente, se les ha preguntado por “los comportamientos o sucesos más repugnantes” que han presenciado mientras realizaban ejercicio físico junto a otras personas. Y las respuestas… dan miedo. A continuación destacamos las más… ‘fuertes’:

- Un hombre segura que hay compañeros de vestuario que lo primero que hacen al salir de la ducha es “utilizar el secador para secarse los genitales”.

- Una mujer se queja de que otro usuario se tiró un pedo en su cara al hacer fuerza para levantar una gran cantidad de peso y justo en el momento en el que ella cogía aire tumbada en el banco de pesas para levantar  las suyas.

- Otra mujer afirma que una compañera “se hizo caca encima por el esfuerzo que estaba haciendo para levantar peso”.

- Un hombre se queja amargamente de la costumbre que tienen algunos de “chupar y sorber” del grifo de la fuente de agua.

- Varios usuarios se quejan de que el sudor no es el único fluido que algunos ‘esparcen’ por las instalaciones. Aseguran toparse (y mancharse) habitualmente con saliva, flemas, cera de oído, vómito, heces (en la ducha), sangre menstrual (en la ducha y en las cortinillas), esperma y orina (en el sueño del baño e, incluso, cerca de una de las máquinas para ejercitarse.

- Una mujer asegura haberse cambiado de gimnasio al ver cómo el portero secaba el suelo del baño y el inodoro “con las mismas toallas que utilizamos los usuarios para secarnos).

-“Una vez vi a un hombre masturbándose en la sauna, cuando terminó y se marchó como si nada, dejando el semen en el suelo. Me recordó a una compañera de clase del colegio que se comía los mocos mientras estudiaba. Deberían salir juntos”, afirma otro usuario.

Los responsables de la encuesta pidieron a los usuarios que “fueran lo más sinceros y explícitos que pudieran”, y los encuestados no les han defraudado. Tras analizar las más de 2.000 respuestas recogidas, decidieron dividirlas en tres categorías: Comportamientos ilegales, comportamientos de completamente idiotas y comportamientos infantiles. Las tres categorías estaban repletas.

Fuente:  EITB